Jueves 20/01/2011 - 20:52
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Petroleros en huelga de hambreCaracas, 20 de enero del 2011. Ya se cumplieron las primeras 24 horas de la huelga de hambre, de los trabajadores petroleros. Los huelguistas nos hemos mantenido firmes y con mucha fuerza moral para mantener la lucha hasta obtener el reintegro en la industria.
Ayer en horas de la mañana nos visito un funcionario de PCP (Asuntos Internos) de La Campiña de nombre Robert Rojas, quien nos solicito hacer una reunión con las autoridades corporativas, a los que le respondimos que siempre hemos estado dispuestos al dialogo en la búsqueda de solucionar los problemas laborales.
Ellos nos pedían que todos los compañeros que nos encontramos en el sitio de la huelga nos fuéramos hasta el edificio sede de PDVSA en La Campiña, y nosotros les respondimos que enviábamos a una comisión encabezada por Robert González directivo de la FUTPV despedido recientemente y Jhonny Croquer trabajador de Instrumentación despedido hace un poco mas de 2 años. Los compañeros estuvieron a las afueras del edificio en La Campiña desde las 10 am, y a las 11:30am aproximadamente fueron recibidos por Ian Borrell, Asistente Corporativo de la Gerencia de Recursos Humanos, Cereza Montes, Asistente Corporativo de Asuntos Legales y Carlos Moreno, Asistente Corporativo de Relaciones Laborales.
La reunión comenzó con la exposición del caso por parte del federativo Robert González, quien realizo un resumen de los casos hasta ahora registrados y de los cuales se tiene información. Manifestó también el hecho aberrante de que todos los despidos carecen de alguna solicitud de calificación ante el Ministerio del Trabajo y además en la mayoría de los casos ni siquiera les participaron por escrito o verbal sobre la medida.
En conclusión los despidos fueron forzosos y brutalmente humillantes puesto que los trabajadores se enteraban al momento de ir a su puesto de trabajo les quitaban el carnet y le prohibían el ingreso a las instalaciones. Por otro lado Robert González les aclaró que la solicitud era concreta, y exigió que con la misma facilidad que se aplico los despidos injustificados sin cumplir con ningún procedimiento administrativos de las leyes burguesas, nos retornaran a nuestros puestos de trabajo en las condiciones que para el momento del despido nos encontrábamos y nos canceleran todas las deudas acumuladas. Es decir, que no debería ser necesario burocratizar el ingreso utilizando las providencias administrativas de reenganche, dado que algunos de los trabajadores todavía no tienen las providencias por los retrasos del mal funcionamiento de la Inspectoría del Trabajo y por tener claras evidencias de las violaciones de los derechos e injustos despidos aplicados.
Los Corporativos respondieron que ellos se comprometían a participar a las gerencias respectiva sobre el caso y enviar un comunicado a relaciones laborales de El Palito y La Quizanda, para solicitar información de los casos y desde allí comenzar a dar repuesta. seguidamente Robert González les agradeció la atención cordial prestada por los presentes den la reunión y manifestó que no dudaba de las buenas intenciones y solidaridad humana de los allí presentes, pero les recordaba que desde hace 3 anos vienen luchando y escuchando promesas de ese tipo y sin ánimos de cuestionamientos y con todo el respeto no nos podíamos confiar en pleno de que a partir de esta discusión se diera la solución de la problemática, ya que ellos nos pedían un voto de confianza y que levantáramos la huelga de hambre.
Robert González les solicitó se firmara una minuta y un acta de compromiso donde se reconozca nuestro derechos y ellos manifestaron no estar autorizados para emitir algún documento, a lo que Robert respondió que nosotros no dudábamos de su palabra pero así como el ministro no les daba confianza a ellos ni los autorizaba a dar repuesta efectivas y desconfiaba de los trabajadores, nosotros tampoco podíamos confiar.
Sin embargo haríamos la discusión con el resto de los huelguistas para tomar una decisión, a lo que los representantes de la empresa respondieron que si continuábamos con la huelga no podían garantizar que harían las diligencias ya prometidas verbalmente. A este condicionamiento Robert respondió que los huelguistas nos sometíamos a los riesgos y éramos seriamente responsables de nuestras acciones, y que después de reunirnos con el resto de los huelguista tomaríamos la decisión.
Seguidamente, una vez regresado al sitio de la huelga frente a la Asamblea Nacional Esquina de Pajaritos, se realizo el consenso y se decidió mantener la huelga hasta que se obtenga una repuesta seria y oficial por parte de PDVSA, la Asamblea Nacional o el Ejecutivo Nacional y de ser necesario se irían sumando a la huelga más trabajadores en situación de despido.